Hace pocos días veíamos al alcalde Ballesta y toda la plana mayor de los gobiernos municipal y regional, inaugurar flamantemente los escasos 14.000 metros cuadrados de nueva zona peatonal en Alfonso X que, unidos a otros tantos de la Av. de la Libertad, y alguna que otra pequeña y poco significativa actuación, suman el logro total de recuperación de espacio público para los peatones en 24 años de gobierno popular.

No seré yo quien analice si la inversión realizada, nuevamente en una calle del centro, es excesiva en comparación con las necesidades estructurales y sociales del municipio de Murcia.

Pero permítanme que ponga en duda el acierto de esta actuación, sabiendo que es un gesto aislado, y que no se encuentra enmarcada en un plan ambicioso de recuperación del espacio público para el peatón, frente al coche y la invasión de las terrazas, ni tampoco en un plan integral de movilidad urbana sostenible para todo el municipio.

Es decir, que nos encontramos, como dicen los jóvenes hoy día, en una sencilla operación de postureo urbano y político, que nos llevará a la paradoja de inaugurar, en año electoral, hasta en tres trozos una misma actuación.

Pero seguimos sin renovar y modernizar la red de autobuses del municipio, cambiando por completo su diseño de paradas, líneas y tarifas; seguimos sin apenas aparcamientos disuasorios en los accesos a la ciudad, y los que hay, siguen sin conexión gratuita por bus al centro, y sin bancadas de bicis de alquiler; seguimos sin saber si habrá transporte público al aeropuerto, a dos meses de su apertura… y así un largo etcétera de medidas que se podrían implantar.

Mientras tanto, prepárense, que con las luces de colores, la fiesta de nochevieja en Alfonso X está garantizada!