Los cuatro convenios urbanísticos firmados por el alcalde de Murcia, Miguel Angel Cámara, con los promotores de otros tantos proyectos urbanísticos de la zona norte del municipio han causado un «quebranto económico» al Ayuntamiento por valor de 709 millones de euros, aseguró hoy el edil socialista Marcos Ros.
Ros presentó en rueda de prensa las conclusiones de tres nuevos informes encargados por el PSRM-PSOE a la empresa de tasación Arquitasa, que eleva a más de 583 millones de euros el dinero que el Ayuntamiento dejó de ingresar por la «ridícula» valoración del suelo efectuada en su día por el ex jefe de planeamiento, Joaquín Peñalver.
Según el concejal del PSOE, a esta última cantidad se añaden más de 126 millones de euros del primer informe de tasación, lo que arroja un montante total superior a los 709 millones de euros.
Marcos Ros insistió en que los cuatro convenios de la zona norte, que suponen un incremento de la edificabilidad de 1.377.429 metros cuadrados, suman más de 709 millones de euros, lo que significa «más que todo el presupuesto municipal consolidado para 2007 y casi la amortización de la deuda del Consistorio, que alcanza los 212 millones de euros».
«Con este dinero podríamos funcionar durante todo un año en el municipio de Murcia, amortizar la deuda municipal e invertir en mejorar y re-dotar a Murcia de las infraestructuras obsoletas y escasas de las que dispone», apuntó Ros.
Además, afirmó que «en una sola jornada de pleno municipal, celebrado el 23 de febrero de 2006, el PP aprobó en solitario cuatro convenios que suponen la muerte urbanística de la zona norte y un quebranto económico inadmisible», y señaló que «tomando como base los 415.000 ciudadanos censados, cada murciano habría dejado de ingresar más de 1.710 euros, lo que supondría que podría estar casi dos o tres años sin pagar impuestos municipales».
Marcos Ros: «Con este dinero podríamos funcionar durante todo un año en el municipio de Murcia, amortizar la deuda municipal e invertir en mejorar y re-dotar a Murcia de las infraestructuras obsoletas y escasas de las que dispone»
Por otro lado, informó de que en en todos los casos la valoración realizada por Joaquín Peñalver, y asumida por la Gerencia de Urbanismo, estableció un valor unitario de 120 euros por cada metro cuadrado de edificabilidad que adquirían los promotores, mientras el valor de mercado demostrado por la empresa Arquitasa sobrepasa los 630 euros por cada metro cuadrado de edificabilidad.
Por otra parte, denunció que con la firma de estos cuatro convenios, el alcalde Cámara «está incumpliendo la normativa del Plan General que dice que los promotores compensarán mediante la cesión en metálico del valor equivalente al aumento de edificabilidad».
En ese sentido, explicó que se está incumpliendo la normativa del PGOU porque no se ha aplicado el valor urbanístico, sino un valor «simbólico absolutamente ridículo fijado por Peñalver y consentido por el alcalde de Murcia».
Además, recordó que la Ley del Suelo de ámbito nacional establece un método de obligado cumplimiento para las valoraciones de terreno en suelo urbanizable, que ha sido el empleado por la empresa de tasaciones Arquitasa en los informes encargados por el Grupo Socialista.
Por el contrario, concluyó Marcos Ros, las valoraciones realizadas por Peñalver incumplen tanto el Plan General de Ordenación Urbana como la citada Ley del Suelo de ámbito nacional.